CHARLANDO CON…
Goyo Valmorisco
Trazos de historia
Nuestra gama de vinos Reliquia es un canto al tiempo, a la paciencia, al saber hacer. A la presencia de unos ojos y unas manos que lo trabajaron, que lo cuidaron, que le acompañaron con saberes venidos de lejos y que nos unieron al proceso de creación de una manera limpia y radical. Un hacer en el que la presencia de lo humano es fundamental para que el resultado sea único, singular.
DEJÓ CORRER
SU PLUMILLA
Y SU TIRALÍNEAS
CARGADAS DE TINTA
CUIDADA Y LENTAMENTE
“Mancharse las manos”, dice Goyo, de tinta, de tierra, de vino, da igual. “Pocos intermediarios entre tú y el resultado final, poca maquinaria que te aleje de la magia que está ocurriendo”, para sentir el proceso y formar parte activa de él. Una necesidad de aislamiento para conectar, que compara con lo que debe sentir el vino descansando y madurando en las barricas en completa soledad.
Caligrafía y vino, dos artes que vienen caminando de lejos, que nos trajeron nuestros antepasados desde épocas remotas, como un regalo para seguir explorando con ellos y conectando con un pulso pausado de la vida. Generaciones y generaciones antes que nosotros escribiendo, plantando, comunicando, saboreando…Escritura y vino, dos forma de almacenar la historia en pequeños recipientes cargados de simbolismo atávico.